Ahora de repente pienso en que yo te conocí cuando tu tenías mi edad de ahora y que te vi demasiado joven para desarrollar esta empresa. Pensé en que en algún momento podrían contigo, que conseguirían relegarte, convencerte, manejarte... sin saber que todos estos verbos jamás irían contigo. Es lo que tienen mis 44, que son muy ignorantes y que me hacen pensar que la primera impresión es la que cuenta. Vamos a ser sinceras: si hubiera sido por esa primera impresión, me hubiera quedado con mis militares. Me recibiste con esa cara seria, esa pinta de "subdirectora pija" y esa mirada de "espero que sepas hacer algo, bonita". Pero una vez que me elegiste, casi tuve claro que seríamos más que compañeras de trabajo, compañeras de viaje. Y no me equivoqué.
En estos seis años que llevamos juntas, he descubierto que sabes reir y también llorar, disfrutar y arrugar el ceño (botox en Acción Social, yaaa), comer dulces y castigarte a no hacerlo, y sobre todo, sabes ser amiga, madre, novia, ex-esposa, bailarina, jugadora de padel, patinadora, corredora, recadera, taxista, insomne, vendedora de segunda mano, lectora, masterchef-adicta, golosa y finalmente, mujer con mucho calor!!!!!
Querida cincuentañera, disfruta de tu día.
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Exprésate, pero desde el cariño